Nuevamente exponemos en Catarroja, Enrique y yo.
Es la primera exposición después de la pandemia.
Hemos tenido que hacer concesiones porque estaba previsto que viniese Antonio A. Aldás con su grupo de instrumentos de viento a amenizar la inauguración, pero no pudimos hacerlo por cuestiones de prevención.
Presentamos unos cuarenta cuadros. Como siempre en Catarroja, tuvimos bastante afluencia de público.
Hicimos nuevas amistades y renovamos vinculos con las ya existentes. Catarroja siempre nos deja buen sabor de boca.